Comunicación asociada a procesos legales
Cuando una persona, empresa u organización se enfrenta a un proceso judicial debe ser consciente de que esta situación va a acarrear necesariamente un potencial impacto en su imagen y reputación independientemente de la resolución de este. No en vano, las partes implicadas en estos procesos se exponen forzosamente a dos tipos de juicios: El que llevará a cabo la administración de justicia, y, además, el juicio de la opinión pública, que comenzará en el momento en que se haga pública la investigación, incluso antes de que ésta llega a su fase judicial y a pesar de que nunca lo haga. Los diferentes públicos comenzarán a construir sus propias convicciones y opiniones del proceso, movidos por las noticias y opiniones de analistas en el mejor de los casos, o de tertulianos, que no siempre realizan una aproximación al mismo de manera imparcial. Desde el primer momento en el que la noticia es difundida por los medios de comunicación, sin esperar a que los tribunales se pronuncien, tomarán el protagonismo y con ello, la reputación de la persona, empresa u organización afectada será de dominio público.